Había una vez una mujer que cada día que iba a comprar un chico presumido la insultaba por ser algo
vieja y pobre. Aunque la hermana y la hija la defendieran, la mujer siempre
pensaba que si tuviera más dinero y riqueza, todos la querrían más.
Un día se le
apareció un hada, quien había mandado un elfo oculto, que resulto ser la hija
de la señora, para que la observara. El hada notó que no era muy feliz pero que
tenía buen corazón y sueños que esperaba que se cumplieran. Entonces, le
concedió 1 solo y único deseo.
La mujer pensó y pensó hasta
que….lo eligió; le pidió al hada ser la mujer más joven y rica del pueblo. El
hada, si dar su opinión, se lo concedió y se marchó, pero ésta dejó al elfo
para que viera si la mujer tenía alguna dificultad.
Meses después, la
señorita se había convertido en una egocéntrica y mala persona. La familia
estaba preocupada y ella les dijo que si no les gustaba su personalidad que se
fueran.
Finalmente la familia se fue. La mujer se quedo sola, no tenía a nadie. Ella le pidió
al hada que le devolviera a su familia pero ese ser mágico no cumplió sus órdenes, ya que habían sido sus
acciones las culpables de lo sucedido.
A partir de ese momento, la señora entendió
que es importante la riqueza del amor que la del dinero.
FIN.
